Debido al uso de juegos pirotécnicos y las bajas temperaturas septiembre y diciembre son los meses con mayor incidencia en accidentes por quemadura en los hogares mexicanos.
Según la Fundación Michou y Mau para niños quemados estas son las principales causas de accidentes en los hogares, en su mayoría todos se pueden prevenir.
En entrevista con Noticias MVS, Mauricio González, vicepresidente de la Fundación destacó que es necesario generar una conciencia en los padres que pueda permear en los menores que están expuestos a estos riesgos.
"Con el tema de los cohetes tenemos incidencias, y también sube mucho en temporada de frío por los calentadores, la leña, velas en las comunidades rurales, así que septiembre y diciembre son los meses más difíciles", explicó.
"Alejen a los niños del fuego, de la cocina, explíquenles que no se trata de un juego.
Los adultos pudiéramos prevenir muchísimos de estos accidentes así que es un trabajo en conjunto en donde se conciencia a los padres para permear en los niños", agregó.
Mauricio y su madre, Virginia Sendel abrieron la Fundación Michou y Mau hace 27 años, luego de que en carne propia vivieran un accidente casero, provocado por un corto circuito en el árbol navideño que le costó la vida a su esposa Michell y a su hijo Mauricio.
Tras ser tocados de esta manera, decidieron brindar apoyos, ya que en México no existen los medios idóneos para atender este tipo de accidentes.
"Nuestro fin es atender y/o trasladar con emergencia a niños quemados a centros especializados.
En México el tema de quemaduras es un problema para el que no hay atención en el país porque es un tratamiento muy costoso, así que la intención de llevarlos a otro país para que sean atendidos es porque en México esos niños mueren, no tienen oportunidad", platicó.
Actualmente trasladan a dos niños a la semana al Hospital Shriners en Galveston, Texas para que sean atendidos, y de los más de 100 niños que apoyan al año, además de los casos menores que se atienden en los 8 centros en el país.
"El 90 por ciento de estos accidentes ocurren en casa, y se pudieran evitar si tanto los adultos como los niños tuvieran información. Nosotros tenemos un programa de prevención, pero este es un problema de educación, un tema de mucha necesidad", dijo.
"La incidencia es mucha en gente de escasos recursos, que vive en cuartos redondos y que ahí mismo prende leña para cocinar, para calentarse o para trabajar; y los niños caen estos líquidos hirviendo, también muchos casos son por electrocución, fuego directo y combustible", afirmó.
Los centros de apoyo se ubican 2 en el Estado de México, 1 en Veracruz, 1 en Monterrey, 1 en Guadalajara, 1 en Chihuahua y 1 en Hidalgo, mientras que los casos graves son trasladados al Hospital Shrainers.
Además, la fundación ofrece un programa de prevención,que hasta el momento se ha impartido a más de 30 mil personas.
"Es mucho mejor y más barato prevenir que curar a estos niños. Además de que llegar a estas zonas rurales resulta muy complicado", subrayó Gonzalez.
Actualmente buscan convenios y apoyo con los DIF estatales y con los gobiernos de los Estados para poder realizar campañas de impacto, además de capacitar al personal de estos centros que se queden encabezando equipos de emergencia.
"Atendimos a niños de la guardería ABC, atendimos a un chiquito prematuro del Hospital en Cuajimalpa que resultó lesionado por la explosión, y hoy en día tratamos de hacernos presentes en cualquier accidente donde haya niños con quemaduras con el único interés de ayudar", concluyó González.
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